Rumour has it ...

El jueves llega a Cuatro la enésima serie sobre adolescentes: Gossip Girl. La serie,  según palabras de la Reina Cotilla, es your one and only source into the scandalous life of Manhattan's elite, o lo que es lo mismo: vuestra única fuente sobre la escandalosa vida de la élite de Manhattan. 

Y Gossip Girl es exactamente eso. Nacida de los creadores de The O.C. (Josh Schwartz y Stephanie Savage), con muchos puntos en común (niños ricos y demasiadas fiestas) y basada en los libros de Cecily von Ziegesar, Gossip Girl narra la vida de unos adolescentes del Upper East Side neoyorkino. 

El piloto arranca con el regreso de Serena Van der Woodsen (Blake Lively) a Manhattan.  ¿Por qué se fue? ¿Por qué ha vuelto? La llegada de la que fue la reina del instituto de nuevo a la gran manzana no deja a nadie indiferente. 

A partir de aquí encontramos todos los tópicos de las series teen norteamericanas, empezando por los personajes. La nueva reina del instituto dispuesta a defender su trono con uñas y dientes (Blair),  el novio perfecto (o quizás no tanto) de la reina B. (Nate), el chulito de turno (Chuck), la pequeña proyecto de reina que hará cualquier cosa por ascender socialmente (Jenny)  y el chico poco popular (y con menos dinero que el resto de upper-east-siders), pero inteligente y mono (Dan).

Estos personajes, junto a sus ricos y despreocupados padres (que también tienen sus problemas), van tejiendo la trama capítulo a capítulo, con los previsibles romances, rebeliones y conflictos (y aunque hable de Gossip Girl, esto está presente en toda serie teen que se precie), en una espiral de fiestas y limusinas que tienen  la gran manzana como telón de fondo.

Viendo el planteamiento del guión, la primera pregunta que te viene a la cabeza es ¿por qué la CW gasta el dinero en una serie como ésta? Si ya tienen series como One Tree Hill, 90210 (el spin-off de Sensación de vivir) y Smallville repletas de adolescentes con las hormonas alteradas, ¿por qué la audiencia querría ver más de lo mismo?

Tal vez una de las diferencias destacadas de Gossip Girl sea que está impregnada del elitismo de otras series como Sexo en Nueva York y The O.C.. Elitismo que, a menudo, está llevado al extremo, hasta el punto de ser inverosímil en muchas ocasiones, sobretodo a medida que avanza la primera temporada y los guionistas empiezan a jugar con los personajes. 

Aunque el detalle más característico de la serie (que además es lo que le da nombre) es el personaje de la Reina Cotilla (Gossip Girl). La Reina Cotilla es la narradora de la historia cuyo personaje, como también sucede en Mujeres Desesperadas, es tan sólo una voz en off (Kristen Bell).

La Reina Cotilla es la redactora de un blog (como nuestro Popcorner pero con más fans) que cuenta todo los cotilleos de los adolescentes del Upper East Side. Y todos los upper-east-siders viven conectados a las nuevas tecnologías las 24 horas al día. Siempre que algo sucede, hay alguien cerca con un móvil con cámara (los nuevos reporteros del siglo XXI) preparado para contárselo a la Reina Cotilla. Cinco minutos más tarde sonarán los móviles de todos: la Reina Cotilla publica las noticias.

Jura que nunca revelará su identidad, pero eso no evita que la Reina Cotilla se convierta en el centro de la vida de los upper-east-siders y de los espectadores. Todos tenemos nuestro lado cotilla, tal vez sea eso lo que haga que Gossip Girl sea algo más que otra serie teen (y los guiños de Blair Waldorf a Audrey Hepburn también ayudan).

Mirad a vuestro alrededor y cuidado con los móviles, la Reina Cotilla siempre está alerta.

You know we love you

XOXO Emmapetrés